El equilibrio entre velocidad y precisión. Por Jeff Gonzales.

Jeff GonzalesDurante nuestros cursos les preguntamos a los alumnos cómo entrenan para disparar más rápido. A veces escuchamos respuestas bastante interesantes, pero la que estamos buscando es «disparo más rápido».

El equilibrio definitivo

El equilibrio entre velocidad y precisión ha de ser el auténtico objetivo de todo el mundo a la hora de disparar. El error que apreciamos más habitualmente aparece cuando un alumno pretende anteponer la velocidad a la precisión en las primeras etapas de su desarrollo como tirador. Los principios básicos del tiro constituyen tus cimientos y esos cimientos han de ser sólidos como una roca porque en un momento dado tendrás que apretar el acelerador. Un disparo preciso lento no es mejor que un fallo rápido. Estoy seguro de que todos hemos escuchado alguna vez aquello de que uno no conoce sus límites hasta que se esfuerza por superarlos. No podría estar más de acuerdo con eso, aunque es un poco más complicado.

Correr en circuito

Cuando hablamos de sobrepasar los límites se suele utilizar como analogía un circuito de carreras. Tomas las rectas con el acelerador a fondo, pero tienes que tomar las curvas y ahí es donde encontramos nuestros límites. Sin embargo, el error que se comete habitualmente radica en pensar que llevamos un coche de carreras desde el primer momento. Un coche de carreras se fabrica desde el principio para circular a altas velocidades y tomar las curvas con una precisión milimétrica. Sin embargo, el alumno corriente conduce una furgoneta con pegatinas en la parte de atrás (no es que eso sea nada malo). Aunque puedo meterme con la furgoneta en el circuito, la verdad es que no voy a ir demasiado rápido y sin lugar a dudas no tomaré bien las curvas.

El examen de conducir suspenso

Ahí es donde los cimientos entran en la ecuación, tienes que construirlos desde la base. Puedo conseguir que la furgoneta alcance los 300Km/h, simplemente la lanzo desde la bodega de una avión de transporte. Obviamente el súbito frenazo al llegar al suelo no supone la mejor opción para poder hacer el viaje de vuelta. Para ir a más es fundamental que te tomes tu tiempo, aunque resulta muy frustrante. Hay tanto en lo que tienes que pensar que aunque parece fácil el tiro constituye una tarea compleja. Una vez te hayas tomado tu tiempo, dedícate a fabricar tu coche. Tienes que sacarlo al circuito y superar los límites. Nunca sabrás si las nuevas ruedas o el motor funcionan a la altura de tus expectativas hasta que superes los límites.

Pisa a fondo

En un determinado momento a lo largo del curso, normalmente una vez hemos cubierto los principios básicos del tiro lo suficientemente bien y los alumnos han demostrado satisfactoriamente su rendimiento, toca pasar a conseguir que disparen rápido. Literalmente les digo que quiero que disparen tan rápido como puedan garantizar el impacto. Eso quiere decir que cada vez que dispares al blanco lo vas a hacer tan rápido como tu coche pueda tomar las curvas. Unos estándares de rendimiento bien definidos son la única forma de saber si estás superando tus límites, sin ellos estarás jugando a las adivinanzas, estándares tanto en cuanto a velocidad como a precisión. Cuando observo que un alumno falla, no es que no fuera lo suficientemente rápido, sino que no fue lo suficientemente preciso para cumplir con el estándar exigido.

La velocidad es importante, pero no a costa de la precisión, aunque la precisión requiere ser lo suficientemente rápido.

Trident Concepts (TRICON). Jeff Gonzales.Jeff Gonzales


Lo que tampoco vale para poder correr más es quitar las curvas de la carretera, lo que viene siendo disparar a distancias más cortas a las que fácilmente se puede impactar sobre el blanco a pesar de la velocidad. El circuito de carreras tiene rectas, unas más cortas y otras más largas, y curvas, unas más abiertas y otras más cerradas. Hay que superar los límites para saber dónde están, pero con cabeza, que la potencia sin control no sirve de nada.


Jeff Gonzales, de Trident Concepts (TRICON)Jeff Gonzales está al frente de los diversos entrenadores e instructores que forman Trident Concepts, LLC., una empresa basada en la realidad que se especializa en formación y técnicas de protección personal para enfrentamientos armados o sin armas. Su lema es «Concepts that meet reality» [Conceptos que se ajustan a la realidad].

Jeff fue un condecorado y respetado SEAL de la Armada estadounidense  y ha trabajado en una amplia variedad de entornos y capacidades por todo el globo. Aporta a la empresa no sólo sus habilidades sino también su capacidad para gestionar y aprovechar al personal para atender mejor los intereses de la empresa y sus clientes. Su objetivo no consiste simplemente en adiestrarte sino en prepararte mejor para la peor situación. Jeff también es el autor del libro Combative Fundamentals, An Unconventional Approach [Principos de Combate, una visión no convencional], actualmente de venta al público.  El libro mantiene un buen ritmo de ventas y la mayoría lo consideran una referencia excelente. Se trata de un libro imprescindible para tiradores serios de este sector.


El Momento del Combatiente con Armas de Fuego era una breve reseña semanal para SoldierSystems en la un maestro dejaba unas palabras de sabiduría. Esta reseña se publicó 26 de septiembre de 2015. Eric Graves, editor de SoldierSystems, nos autorizó a publicar una traducción al español de esta serie de reseñas.

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