La Fiscalía declaró que los policías del condado de Baltimore actuaron justificadamente, al disparar contra un sospechoso de robo a mano armada, que falleció durante un tiroteo con la Policía, en la localidad de Dundalk (EE.UU.), en el que resultó herida una policía y un transeúnte.
El fiscal del condado de Baltimore, Robbin S. Coffin, declaró que las secuencias de vídeo grabadas por las cámaras de la Policía y de la Empresa Municipal de Transportes de Maryland muestran que los policías actuaron correctamente durante el enfrentamiento armado contra Blaine Robert Erb, de 35 años de edad, que tuvo lugar el 7 de junio de 2017. La agente de policía Slocum, con 13 años de servicio y adscrita a la Comisaría 12 en Dundalk, recibió dos disparos en una pierna durante el enfrentamiento. Tras ingresar en el hospital el día de los hechos, recibió el alta el 13 de junio.
Uso del torniquete con policía herida en la pierna.
Un interesante detalle que se puede observar al final del vídeo es el uso del torniquete. Se puede ver varios torniquetes que salen del propio cinturón de varios compañeros de la agente herida, lo que demuestra que se trata de un elemento del equipo personal que utilizan habitualmente y posiblemente habrán recibido cierta formación sobre cómo utilizarlo.
Según declaraciones de la Policía, los agentes recibieron un aviso en torno a las 14:49 del 7 de junio por el que se les informaba de un robo a mano armada que se estaba produciendo en la Avenida Dundalk. Los policías fueron informados de que un hombre había robado a dos personas a punta de pistola. Según las imágenes de las cámaras del autobús de la MTA, Erb se subió al autobús en torno a las 14:53 en la parada del centro comercial Logan Village de la Avenida Dundalk con la calle Broening Road, en Dundalk.
Justo después dos policías detuvieron el autobús en la esquina de la Avenida Dundalk con la calle Belclare Road y subieron a hablar con Erb, momento en el que sacó una pistola y realizó un disparo contra un policía que estaba en la salida trasera del autobús. Acto seguido Erb le dijo a todo el mundo que salieran del autobús.
Entonces se puede ver en el vídeo a Erb en la salida trasera del autobús empuñando dos pistolas y disparando en todas direcciones. Así continúa durante aproximadamente un minuto y medio, momento en el que para un rato y recarga. En ese instante se acerca hasta la parte delantera del autobús y realiza algunos disparos, que reciben respuesta por parte de la Policía, que también le dispara. Al final Erb sale corriendo del autobús por la puerta trasera.
Policía con cinturón de seguridad puesto.
Mientras tanto desde el exterior del autobús, la cámara corporal de un policía capta los momentos de tensión. El policía recibe el aviso y se dirige al lugar de los hechos en su coche patrulla. Resulta de destacar el hecho de que el policía lleva el cinturón de seguridad en todo momento y sólo se lo quita instantes antes de llegar al lugar, como debe ser y así nos lo recordó John Shrek McPhee.
El policía saca la escopeta del maletero.
En cuanto llega se baja del coche y se dirige al maletero, de donde saca una escopeta, que posteriormente utiliza contra Erb sin un efecto aparente. Supongo que una vez agota la munición de la escopeta (sin munición no sirve de nada) es cuando la tira al suelo, literalmente, y pasa a empuñar su pistola para posteriormente realizar varios disparos en la dirección hacia la que parece que corre Erb.
El policía tira la escopeta al suelo.
Como se puede observar la escopeta le sirve de bien poco, y es que se trata de un detalle curioso, dado que en EE.UU. hace ya años que muchos cuerpos de Policía han sustituido la clásica escopeta calibre 12 por un fusil semiautomático tipo AR-15 en calibre 5,56x45mm. Se dice que el cambio se produjo a raíz del famoso tiroteo entre la policía y los dos atracadores de una sucursal del Banco de América en el distrito de North Hollywood, en Los Ángeles, el 28 de febrero de 1997 (vídeo del tiroteo). Los atracadores iban protegidos con blindaje casero que les protegía de los proyectiles de pistola y escopeta que disparaba la policía y contaban con una potencia de fuego infinitamente superior a la de la Policía: un fusil Norinco Type 56 S-1S (una variante del AK-47) modificado ilegalmente para fuego automático, un fusil Bushmaster XM15 Dissipator y un fusil HK-91 con cargadores de tambor de alta capacidad, así como una pistola Beretta 92FS. Se estima que en aquel tiroteo los atracadores realizaron unos 1100 disparos y la Policía unos 650 disparos. Ambos atracadores acabaron muertos tras dejar a doce policías y ocho civiles heridos.
Finalmente parece que Erb resulta abatido por los disparos de la Policía en una zona de césped aledaña a donde se detiene el autobús. Un policía se le acerca rápidamente pero Erb desatiende las instrucciones de la Policía, que se puede escuchar en el vídeo como le dicen que «¡tira el arma! ¡tira el arma!». Así que vuelven a disparar a Erb y así se da fin al enfrentamiento.
Disparo a distancia de entre 25m y 30m.
Otro de los detalles que salta a la vista es la distancia a la que tiene que disparar el policía que graba las imágenes con su cámara corporal. Calculando la distancia en Google Maps, se trata de entre 25 y 30 metros, o puede que más, lo cual queda totalmente fuera de la distancia media de enfrentamiento que algunos predican. Esto no viene a demostrar más que la distancia de un enfrentamiento la marcan las circunstancias, que se escapan a nuestro control, y que las estadísticas son solo números. Hay que estar en disposición de batir un blanco esté a la distancia que esté.
Distancia de los disparos.
«Lo cierto es que tuve que ver los vídeos un par de veces porque tenía ciertas dudas», declaró el fiscal del condado de Baltimore Scott Shellenberger. Shellenberger declaró que tras revisar el caso, incluidos los vídeos de las redes sociales, de la cámara corporal de la Policía y de las cámaras del autobús de la MTA, no había duda de que los disparos de los policías estaban justificados y no se presentaría cargos. «Y cuando se revisan los vídeos se saca una imagen muy completa de que estos policías estaban justificados al utilizar la fuerza letal, porque no solo sus vidas estaban en peligro, sino también las de muchos civiles que se encontraban en la zona», declaró Shellenger.
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