Sin lugar a dudas, armas de este tipo ─el misil─ constituyen el summum en cuanto a potencial de incapacitación. No habrá nadie que no quede incapacitado en el acto. Si a ello se le añade la precisión de su guiado hasta el blanco, se obtiene un arma no ya del futuro, sino de plena actualidad y vigencia. Prueba de ello es el uso extensivo que le dieron a los misiles Griffin las Fuerzas de Operaciones Especiales estadounidenses.
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Buen sistema para incapacitar adversarios.
Hace no mucho tiempo, se podía ver un vídeo de militares franceses en el que paraban un vehículo cargado con explosivos que se dirigía hacia ellos. El resultado es espectacular y letal.
Un saludo