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Instructores
El mercado de la formación está inundado de instructores que todo lo que quieren es que les entregues tu dinero para que puedan convertirte en un guerrero ninja. El tipo de tu zona que el año pasado era instructor de tiro de la asociación nacional del arma [National Rifle Association (NRA)], se ha comprado un conjunto de prendas 5.11 (con un poco de suerte en negro ninja), una funda muslera para la pistola, y le ha añadido 13 cosas a su económico FUSA. Ahora él es el “instructor de tiro táctico” local. Como en casi todas las cosas en la vida recibes lo que pagas. En la mayoría de los casos se trata de una cuestión de que en el reino de los ciegos el tuerto es el rey.
Si pretendes invertir tu dinero sabiamente, investiga un poco sobre el instructor. ¿Tiene buena reputación por ofrecer a sus alumnos aquello por lo que están pagando? Ten en cuenta que casi todos los instructores de tiro tienen una especialidad que se basa en su experiencia en la vida, bien sea como policías, militares o tiradores deportivos.
Es tu trabajo determinar si la especialidad que ofrecen cumple con tus expectativas o requisitos de aprendizaje. Una de las cosas que más habitualmente se encuentran en mi sector consiste en preguntar por las reglas en el campo de tiro de otros instructores o los requisitos individuales de sus cursos. La pregunta es ¿por qué enseño algo diferente al instructor A o B? En realidad, todos tenemos diferencias en nuestra instrucción, lo que no quiere decir que algunos de nosotros estemos equivocados, sino que simplemente tenemos diferentes puntos de vista para resolver el problema.
A la mayoría de alumnos les recomiendo que se tomen mi curso o el de cualquier otro con la actitud de llevarse aquellas cosas que les gusten o crean que pueden usar. Si hay cualquier cosa que enseñe el instructor con la que no estés de acuerdo o que no te guste, simplemente dale al botón de borrar. Escoge al tipo al que vayas a entregarle tu dinero basándote en su reputación en cuanto a proporcionar la información que estás buscando, a su capacidad para explicar y justificar su métodos de enseñanza, y, lo más importante, a su capacidad para corregir y mejorar tu rendimiento.
Asiste al curso con una mente abierta y una actitud positiva. Presta atención, muéstrate predispuesto, estate preparado para acudir a la línea de tiro cuando seas llamado, y trabaja duro para no ser “ese tipo”.
Ken Hackathorn
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Lo que dice Ken Hackathorn además de reiterativo y recurrente resulta obvio y evidente. Yo creo que da en el clavo al decir que «se trata de una cuestión de que en el reino de los ciegos el tuerto es el rey«. Y yo me pregunto ¿cómo puede un ciego saber que se encuentra ante un tuerto? Dicho de otro modo ¿quién es ese hombre? ¿operador o wannabe?. Si no disponemos de referencia alguna ¿cómo vamos a comparar a un instructor frente a otro para saber cuál de los dos es el tuerto?. Yo creo que son más los falsos profetas o doctores liendres (los tuertos) que los instructores de verdad, así que no será fácil elegir a la persona adecuada para formarnos. John Chapman nos hablaba de este tema en su artículo sobre cómo formarte a ti mismo.
Antes de depositar nuestra confianza, además de nuestro dinero, en un determinado instructor, hay que asegurarse de que aquellas TTPs. que nos vaya a enseñar sean las que resulten más eficaces que se sepa. Normalmente coincidirán para muchos, aunque no es raro encontrarse con cierta diversidad, como explica Kyle Defoor.
En nuestro caso, uno de nuestros principales problemas quizás sea el que información en español hay poca y no toda buena, de ahí que haya quien pudiera lograr convencernos con falsos argumentos simplemente por no ser nosotros capaces de descartarlos desde el primer momento por falta de información disponible al respecto. Por ejemplo, estímulos dolorosos para inducir estrés ¿realmente sirve para algo?
Otra cuestión sería si hace falta salir de España para recibir formación. Pues creo que sucede lo mismo que con que no hace falta estar en la NBA para jugar al baloncesto.
En fin, de todo se aprende algo. Se puede aprender el cómo hacer bien las cosas, o el cómo hacer mal las cosas, o el cómo no hacer las cosas. El caso es saber qué se está aprendiendo en cada momento, para no confundirnos, pero ¿estamos en disposición de ciscernir una cosa de la otra? Ahí creo que la clave es contar con buenas referencias en forma de instructores en los que se pueda confiar por su propia reputación como tales. Lo que creo que no sirve de nada es conformarse con lo único que conozcamos, especialmente si es poco y no es bueno, aunque no lo sepamos.
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Ken Hackathorn ha trabajado como Instructor de Tiro en las Fuerzas Especiales del Ejército de Tierra estadounidense y en el Gunsite y en la NRA. Actualmente es Instructor de Tiro certificado por el FBI, Policía Local en el condado de Washington (Ohio, EE.UU.), así como miembro e instructor del Equipo de Respuesta Especial [Special Response Team (SRT)]. Ken ha formado a miembros de Fuerzas de Operaciones Especiales de las FAS estadounidenses, de Equipos de Seguridad Antiterroristas de la Flota [Fleet Antiterrorism Security Team (FAST)] y del Grupo de Formación de Operaciones Especiales [Special Operations Training Group (SOTG)] del Cuerpo de Infatería de Marina estadounidense, así como del SWAT y del Equipo de Rescate de Rehenes [Hostage Rescue Team (HRT)] del FBI. Además Ken ha impartido formación en diferentes cuerpos de policía locales, estatales y federales, estando en activo como instructor de tiro durante los últimos 25 años. Por otra parte, ha escrito artículos relacionados con armas de fuego para revistas tales como Guns&Ammo, Combat Handguns, Soldier of Fortune, y últimamente American Handgunner y ha contribuido con al menos otros seis medios. Ken también fue miembro fundador de IPSC y IDPA.
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El Momento del Combatiente con Armas de Fuego consiste en una breve reseña semanal patrocinada por Alias Training & Security Services para SoldierSystems. Cada semana Alias te presenta a un maestro que a cambio te dedica unas palabras de sabiduría para tu consideración. En EBdT2 hemos sido autorizados para reproducir una traducción al español de esta serie de reseñas.
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