La verdadera historia sobre cómo un cabo del Ejército del Aire estadounidense mató a un soldado con una pistola SIG Sauer M18 (P320) y dijo que se disparó sola cuando estaba encima de la mesa.

Desde un principio muchos pensamos que la versión más verosímil sería la que acabaría saliendo a la luz, aunque no faltaron algunos ansiosos porque se confirmara la versión más inverosímil de que la pistola SIG Sauer M18 (P320) se hubiera disparado sola. Como te explicamos entonces, los hechos se produjeron el 20 de julio de 2025, aproximadamente a las 01:30 de la madrugada, en la Base Aérea F.E. Warren (Wyoming) del Ejército del Aire estadounidense, cuando el disparo de una pistola reglamentaria SIG Sauer M18 (P320) mató al soldado Brayden Lovan, de 21 años. Enseguida corrió el bulo por Internet de que la pistola estaba en su funda encima de la mesa y se disparó sola. El bulo se apoyó en la noticia por la que a raíz de este incidente el Mando de Ataque Global del Ejército de Tierra estadounidense pausaba el uso de la pistola reglamentaria M18 (SIG Sauer P320) hasta esclarecer si realmente tuvo algo de responsabilidad en esta muerte.

Posteriormente, el 8 de agosto de 2025, se supo de la detención de una persona acusada de hacer una declaración oficial falsa, obstrucción a la justicia y homicidio involuntario. Esto venía a confirmar la versión más verosímil de lo sucedido, por la que tras la muerte del soldado Lovan se encontraría una persona y no que la pistola se hubiera disparado sola, sin intervención humana, como algunos bocazas se dedicaron a divulgar.

A pesar de todo, el Mando de Ataque Global [Global Strike Command] del Ejército del Aire estadounidense [US Air Force] llevó a cabo una revisión exhaustiva de todas sus pistolas ─mientras la investigación del incidente seguía su curso─. Concluida esta revisión, la pistola reglamentaria SIG Sauer M18 (P320) volvió al servicio activo a finales de agosto de 2025, tras una «pausa» de un mes, sin haberse encontrada razones para pensar que pudiera dispararse sola, ni que hubiera sido responsable de la muerte del soldado Lovan.

Faltaba por conocer el resultado de la investigación que determinara qué fue lo que pasó realmente aquel 20 de julio de 2025 que acabó con el soldado Lovan muerto por un disparo en el pecho. Ahora se ha sabido la historia.

El cabo del Ejército del Aire estadounidense Marcus White-Allen se inventó una historia para ocultar que le había disparado en el pecho con su pistola M18 al soldado Braden Lovan, según declararon dos soldados de la Base Aérea F.E. Warren el pasado 30 y 31 de octubre de 2025 ante un tribunal militar. Como consecuencia, el cabo Sarbjot Badesha y el cabo Matthew Rodríguez se declararon culpables de falso testimonio respecto al incidente, según informó el Ejército del Aire estadounidense en un comunicado de fecha 31 de octubre de 2025. Los cuatro implicados en el incidente estaban destinados juntos en el 90º Escuadrón de Fuerzas de Seguridad [90th Security Forces Squadron] del 90º Grupo de Fuerzas de Seguridad [90th Security Forces Group] de la 90ª Ala de Misiles [90th Missile Wing] del Ejército del Aire estadounidense.

White-Allen se convirtió en el principal sospechoso de lo que al principio parecía una muerte accidental y fue detenido a principios de agosto de 2025. El 8 de octubre de 2025 le encontraron muerto en su habitación y se suspendió temporalmente la investigación judicial. Los detalles en torno a la muerte de White-Allen no están claros todavía.

En el juzgado militar los cabos Badesha y Rodríguez declararon que vieron a White-Allen sacar su pistola reglamentaria de la funda y apuntarle al pecho a Lovan en plan coña. Entonces escucharon un disparo y vieron a Lovan en el suelo. Inmediatamente después del disparo, White-Allen le dijo a Badesha «esto es lo que pasó: diles que dejé mi cinturón de servicio en la mesa y se disparó». Rodríguez declaró que White-Allen le dijo por separado que le dijera al personal de emergencias que llegara al lugar de los hechos que la pistola de White-Allen «se disparó sola».

Inicialmente se barajó la muerte accidental de Lovan, pero las pruebas de laboratorio determinaron que no había defectos en la pistola reglamentaria de White-Allen y las evidencias determinaron que White-Allen tenía el dedo sobre el disparador de la pistola cuando se la puso en el pecho a Lovan.

El tribunal militar condenó a Badesha a 30 días de prisión, la degradación al soldado y una multa de 1.545 dólares. Rodríguez fue condenado a 10 días de prisión y 15 días de arresto en la base, la degradación a soldado de primera y una multa de 500 dólares. Continúa abierta la investigación sobre la muerte del cabo White-Allen.

Fuente: COX, Matthew. ‘Here’s the Story’: How an Airman Lied to Cover Up M18 Shooting. Air and Space Forces Magazine. 1 de noviembre de 2025.

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