Cualquiera que haya tenido algo que ver con «observación de fuegos» sabe lo que es una petición de fuegos [call for fire], de forma que entenderá este simulador y puede que disfrute un rato practicando el procedimiento de observación y corrección de fuegos. El que nunca haya escuchado hablar de observación, corrección y peticiones de fuegos, o no haya tenido que ver con ello, también puede disfrutar con este simulador y entender cómo funciona el procedimiento. Al fin y al cabo, no es raro que lo hayas visto en alguna película o vídeo.
La observación de fuegos, así como la propia petición de fuegos, es un tema que estudié y practiqué un poco ─como casi cualquier militar─, e incluso llegué a dar alguna clase al respecto, pero no soy ningún experto. Así que no voy a entrar en demasiados detalles, pero te dejo una breve explicación.
Antes de continuar, aquí tienes un vídeo que explica cómo funciona la observación de fuegos de artillería en nuestro Ejército de Tierra.
Una petición de fuegos no es más que eso, pedir fuegos de apoyo a una unidad de apoyo de fuegos (morteros o artillería). De tal forma que un «observador avanzado» solicita a una unidad de apoyo de fuegos (morteros o artillería) que dispare sobre un blanco*. Esa unidad confía en el observador avanzado para observar y corregir sus disparos, dado que por sí misma no tiene visual sobre el blanco ni sobre los impactos. Será el observador avanzado el que tenga que apuntar al blanco, «apreciar» los impactos y enviar las correcciones correspondientes al Fire Direction Center (FDC) [centro de dirección de fuegos] de la unidad de apoyo de fuegos. El observador avanzado se encuentra sobre el terreno junto con la unidad apoyada, aunque puede pertenecer a la unidad de apoyo e integrarse en la unidad apoyada para una operación o misión. Cualquier comandante de pelotón, sección y compañía puede ejercer como observador avanzado en cualquier momento y realizar una petición de fuegos cuando su unidad lo requiere, por ejemplo, cuando tiene contacto con el enemigo.
*Las armas baten blancos y las operaciones o misiones tienen objetivos. Sobre un blanco se dispara y un objetivo se asalta o se ocupa. Sobre o en torno a un objetivo puede haber varios blancos a batir.
Todo lo que gira en torno a una petición de fuegos se basa en que la unidad de apoyo de fuegos no ve el blanco y tiene que recibir toda la información sobre el blanco y sus disparos de un tercero, el observador avanzado. Este observador avanzado localiza el blanco, le indica a la unidad de apoyo de fuegos su posición y observa los impactos, para acto seguido convertir sus apreciaciones (medida angular en milésimas artilleras) en correcciones (medida lineal) y enviárselas a la unidad de apoyo de fuegos.
Como ejemplo aquí tienes un vídeo en inglés de una petición de fuegos de mortero de 81 mm del Ejército de Tierra estadounidense.
Tanto la petición de fuegos en sí, como la forma de corregir los fuegos, tienen su procedimiento, y es lo que comprende este simulador, con el que se puede practicar tal y como sería en la vida real, salvando la distancia.
A continuación puedes ver una demostración del simulador Call For Fire del que trata este artículo.
Daryl Batchelor es el creador de este fantástico simulador, para el que se basó en su experiencia como antiguo capitán del Ejército de Tierra australiano. El simulador sigue el procedimiento que utilizan en su país, que coincide fielmente con el utilizado por otros muchos países, por lo que su utilidad trasciende fronteras y nos sirve también a nosotros.
Se trata de un simulador bastante sencillo, pero muy práctico, que permite ensayar en cualquier parte el procedimiento de observación de fuegos. Solo necesitas el teléfono móvil, sea Android o iPhone. Puedes descargar el simulador directamente desde la Play Store de Google o la App Store de Apple. El simulador también está disponible en español. Yo mismo realicé la traducción y he puesto la voz 😉 de forma totalmente altruista, para mayor difusión de un simulador que me parece una gran idea.
Como es lógico y razonable, el simulador tiene un coste, aunque tan reducido como menos de un desayuno (poco más de 2 €), que bien merece su creador como incentivo y motivación para continuar desarrollando tanto este simulador como algún otro de esta misma temática. Sinceramente, creo que merece la pena, especialmente si tiene interés por practicar en cualquier parte lo que es la observación de fuegos. El simulador adquiere mayor relevancia en el caso de militares que tengan que aprender o hayan aprendido ya esta cuestión. La práctica en este simulador permite mantener fresco el procedimiento. Pero que no te dé ningún reparo intentarlo, porque el procedimiento no es ni mucho menos ingeniería aeronáutica y resulta bastante sencillo de aprender.
Personalmente, me parece que es una pena que simuladores de este tipo no reciban mayor atención. Solo con una difusión suficientemente numerosa se puede fomentar el desarrollo de este tipo de simuladores, que tienen tanto que ofrecer a propios y extraños.
Invierte solo un par de euros y dale una oportunidad a Call For Fire.
Ya nos contarás qué te parece.
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icen que las aplicaciones civiles de tipo coordenadas de lugares etc,, etc no son del todo precisos a cosa hecha para que no lo puedan utilizar los molotes como petición de fuego, es decir solo los satélites militares son los precisos,, ,esto con los Drones marcando en directo ya hasta los malotes dan con mucha precisión en su objetivo.