Puede que no haya tenido demasiado impacto mediático pero el pasado domingo 29NOV15, en Málaga, sufrimos una gran pérdida en un trágico incidente. Se trata de nuestro compañero policía nacional Antonio Reyes Rubio, que a sus 60 años de edad y con tantos años como yo de vida, 37 años (inició su entrega y sacrificio por los ciudadanos en el mismo mes y año en el que yo nací, septiembre de 1978), dedicados al servicio a España, fue a encontrar la muerte en acto de servicio al ser arrollado por un coche tras haber auxiliado a otro conductor que había tenido un accidente.
«Murió ayudando a la gente». Diario Sur. 01DIC15.
Antonio, lamento sinceramente tu pérdida y me entristece profundamente la noticia de tu muerte. Ya sabes que en nuestra Familia, las Fuerzas Armadas y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, toda pérdida de un Hermano de Armas se siente como tal. ¡Gracias por todo!.
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¡Antonio, que Dios os bendiga!
¡Descansa En Paz, Hermano de Armas!
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Quisiera aprovechar estas líneas para transmitir mis más sentidas y sinceras condolencias a todos los familiares, compañeros y amigos de Antonio y enviarles todo el ánimo que estas sencillas líneas puedan transmitirles.
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(El que así lo desee puede sumarse a este pequeño homenaje escribiendo aquí unas palabras. Al final de esta página podéis encontrar un recuadro en el que escribirlas.)
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Descansa en Paz. Mi más sentido pésame para amigos, compañeros y familia. Un abrazo.
DEP. Policía hasta el final. Un nuevo Ángel custodio allí arriba.
Descanse en paz, mi más sentido pésame a su familia.
Descanse en paz, dio el máximo que se puede dar por la patria y sus ciudadanos.
D.E.P.
Seguro que ya estas enrolado en el grupo de «Z» de los Santos Ángeles Custodios y desde arriba estas vigilando.
Mi más sentido pésame a su familia y a sus compañeros del GAC-1.
Descansa en paz, hermano de armas.
Un ángel custodio que regresa al Creador. Un abrazo a quienes le conocieron y amaban.
Descanse en paz.