Los Cazadores de Mitos (Mythbusters) es un programa de televisión que se emite en el canal Discovery Channel protagonizado por dos antiguos especialistas en efectos especiales. El objetivo del programa es demostrar si determinados mitos constituyen realmente un mito o bien se trata de una realidad.
Pues bien, esta vez la han liado parda, aunque sin graves consecuencias, afortunadamente.
El pasado martes, 06DIC11, pasadas las 1600 horas, en la ciudad de Dublin (California, EE.UU.), uno de los experimentos del programa a punto estuvo de convertirse en una tragedia. Una bola de cañón de algo más de 15 cm. de diámetro erró su verdadero blanco, que consistía en unos enormes depósitos de agua que supuestamente detendrían el proyectil, durante un experimento que consistía en verificar la velocidad con la que se podía disparar esta bola de cañón con un cañón casero. El experimento tuvo lugar en el campo de desactivación de explosivos de la Policía Local del Condado de Alameda pero el proyectil voló más de 700 metros hacia el Este del campo alcanzando una vivienda en el paraje conocido como Cassata Place.
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La bola de cañón atravesó la puerta y fue rebotando por el interior por paredes y techos hasta subir a la segunda planta donde se coló en la habitación donde dormían un hombre, una mujer y un niño que únicamente se despertaron por el polvo de la escayola desprendida por la dichosa bola de cañón al atravesar la pared que da al exterior, justo al lado de la ventana.
Pero no quedó ahí la cosa, ya que la bola continuó rebotando tras salir por la pared, cruzó los seis carriles de la calle Tassajara, rompió varias tejas de una casa en la calle Bellevue Circle y finalmente impactó en un monovolumen Toyota Sienna color beige de la familia Gill que se encontraba aparcado frente a su casa en la calle Springvale Drive.
Afortunadamente en su largo camino la bola de cañón no se llevó a nadie por delante y únicamente ocasionó ciertos destrozos fácilmente reparables.
El lugar de los hechos viene siendo utilizado frencuentemente por el programa y en los últimos siete u ocho años han rodado más de 50 episodios sin ningún incidente de este tipo, aunque las condiciones de uso de las instalaciones indican que el programa asume la responsabilidad por cualquier percance.
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Afortunadamente no hubo daños personales, esto me recuerda lo que dijo en su día un ministro cuyo nombre no quiero pronunciar «los experimentos con gaseosa».
Fuerza!!!