Era visto que iba a pasar lo que iba a pasar. El martes 26 de agosto de 2025, a las 19:35 horas de la tarde, la madre de un hombre llama al teléfono de Emergencias 911 (112 en Europa) para avisar de la conducta suicida de su hijo, Martin Benes, de 46 años, que estaba con ella en su casa del número 13816 de la calle Far Hills Ln, en Dallas (Texas, EE.UU.). Parece ser que Martin había estado bebiendo alcohol. En la llamada la mujer se muestra muy preocupada, advirtiendo que es muy peligroso y que está gritando que va a matar a todo el mundo. A las 19:46, el hermano de Martin escribe también a Emergencias, explicando que está preocupado por su hermano, que está actuando muy erráticamente e intenta suicidarse, que su madre no consigue razonar con él y ella misma está en peligro, pero no puede salir de su casa. Obviamente, Emergencias envía una patrulla de Policía a comprobar la situación.
Aproximadamente a las 19:40 se da aviso a una patrulla de Policía. La Policía llama a la puerta de la casa a las 19:44 y les abre la madre de Martin, el hombre mentalmente perturbado, que fue la que les llamó. El Sargento Catanzaro habla con la señora y le pregunta por su hijo. La señora parece algo desorientada; en un primer momento parece que le dice algo en español a Catanzaro, que le pregunta dónde está su hijo Martin.
Catanzaro se asoma al interior de la casa llamando a Martin, que aparece en ese momento al fondo y se dirige hacia el policía con un cuchillo en la mano, al tiempo que dice «estoy harto» [I’m done with this shit]. La mujer espera fuera al lado de la puerta mientras su hijo sale y se encara con los policías cuchillo en mano. Tras unos segundos se mete dentro de la casa y cierra la puerta. Catanzaro le dice a madre de Martin que se aleje, pero como no responde se acerca para acompañarla fuera del porche y apartarla de la casa. Al mismo tiempo le pregunta si hay alguien más en la casa, a lo que la señora responde que no hay nadie más.
Uno de los policías observó que Martin tenía sangre, sin llegar a determinar dónde estaba herido. La madre les explicó a los policías que su hijo se había cortado al intentar quitarse el localizador que llevaba en el tobillo. La señora les contó que su hijo le había dicho que ya no quería seguir viviendo y que si la Policía entraba en su casa pretendía quitarse la vida.
En resumen, Martin Benes, de 46 años, pasadas las 19:46 horas del martes 26 de agosto de 2025, se encuentra «solo» dentro de la casa, mentalmente perturbado, habiendo consumido alcohol, con actitud suicida. La última vez que se le vio empuñaba un cuchillo. Dado que está solo en casa, nadie corre peligro, salvo él mismo, dado su estado mental y actitud.
Según el comunicado emitido por la Policía Local de Dallas, con fecha 29 de agosto de 2025, se envió al lugar a una unidad de atención RIGHT, compuesta por un policía, un técnico de salud mental y un paramédico. Además, dado que el Sr. Benes se había quitado el localizador del tobillo se emitió una orden de detención por un presunto delito de agresión con un arma letal. La Policía se puso en contacto con la Unidad de Fugitivos para comprobar la vigencia de la orden de detención y solicitaron la presencia del equipo SWAT, que llegó al lugar en torno a las 23:00 horas del 26 de agosto de 2025.
Los policías del SWAT utilizaron varias tácticas para intentar persuadir a Martin para que saliera, pero no lo consiguieron. Los supervisores del SWAT decidieron entrar y detener a Martin. Aproximadamente a las 01:24 horas de la madrugada del miércoles 27 de agosto de 2025, los policías del SWAT forzaron la puerta y entraron en la casa en busca de Martin. Antes de entrar habían enviado un robot, que localizó a Martin en su dormitorio de la primera planta, echado en la cama.
Los policías del SWAT entraron todo lo sigilosamente que cabe esperar después de haber forzado la puerta y enviado un robot hasta el dormitorio de Martin. No parece que Martin se hubiera inmutado por el posible alboroto, además de la fiesta de luces que se montó dentro de la casa, así que todo apuntaba a que estaba realmente durmiendo. Los policías llegan hasta su dormitorio, entran y comentan entre ellos la situación susurrando para no despertar a Martin. Ven que tiene un cuchillo junto a él en la cama.
Hasta aquí la situación es la siguiente. Martin es una persona mentalmente perturbada, que había consumido alcohol y manifestaba una actitud suicida. Ahora está durmiendo, solo en casa, sin rehenes, con un cuchillo al alcance de la mano, mientras 6 policías armados del SWAT le observan y susurran entre ellos qué hacer. Parece que se masca la tragedia.
¿Realmente era necesario entrar a las 01:24 para detenerle si nadie corría peligro, ya que se sabía que está solo en casa? ¿Qué reacción cabía esperar por parte de Martin dadas las circunstancias ya conocidas por todos? ¿No hubiera sido más práctico esperar a la mañana siguiente por si acaso decidía entregarse? Sigamos con lo que realmente sucedió.
Al ver que Martin dormía con un cuchillo al alcance de la mano, los policías del SWAT deciden despertarle sutilmente dándole una descarga de TASER y gritándole para tranquilizarle. Parece que a Martin no le gusta la idea y se enfada un poco, por lo que se incorpora cuchillo en mano y se dirige hacia los policías, que le disparan hasta 5 veces antes de caer al suelo. En este momento las imágenes se vuelven turbias para no herir la sensibilidad de los espectadores. Se aprecia cómo Martin cae al suelo sentado y acto seguido intenta incorporarse, por lo que recibe un disparo adicional que parece darle en la cabeza. Martin resultó muerto en el acto.
El Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Dallas está llevando a cabo su propia investigación sobre lo sucedido.
En el siguiente vídeo puedes ver la rueda de prensa que dio el Comisario de la Policía Local de Dallas el 29 de agosto de 2025 para explicar lo sucedido, aportando todos los datos, incluidas las imágenes de las cámaras corporales de los policías que intervinieron en esta situación:
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