Cuando el frío aprieta te acuerdas de él, e incluso de toda su familia, especialmente cuando lo sufres en tus carnes. No se trata de una sensación agradable y el propio frío llega a reducir el rendimiento y a limitarlo considerablemente, en mayor medida cuanto peor sea la protección. Aquellas zonas o partes del cuerpo que primero y más directamente van a sufrir las consecuencias del frío serán aquellas que se encuentran más expuestas, tales como las manos, que habitualmente quedan a la intemperie y no cuentan con ningún tipo de protección.
Esas manos tan expuestas al frío resultan imprescindibles para poder manipular cualquier útil o herramienta, como puede ser un arma de fuego, por lo que si sufren por el frío también sufrirá la capacidad de manipulación del arma, pilar fundamental del combate con armas de fuego.
En resumidas cuentas, en el combate con armas de fuego las manos juegan un papel primordial y si quieres mantener en la medida de lo posible tu capacidad para combatir tienes que proteger las manos no solo frente a otras agresiones, sino también frente al frío, que puede ser el origen de una incapacidad temporal severa, o incluso permanente en el caso de congelación.
La necesidad de proteger las manos frente al frío no resulta nada nuevo y habrá acompañado al hombre desde sus orígenes, cubriéndose de algún modo las manos con aquello que tuviera a su alcance en cada momento y lugar. Posiblemente, antes de aparecer los primeros guantes bastaba con cubrir las manos con algún tipo de tejido, o incluso pieles, para tratar de mantenerlas en calor. Habría que retroceder mucho en la Historia para encontrarnos con los primeros guantes, puede que hace ya miles de años. Aunque los guantes no constituyen una innovación actual, sí que han cambiado, para mejor, con los años. No solo por los nuevos tejidos y materiales utilizados en su fabricación, sino por unos diseños más refinados. Todo ello gracias a los avances de la Ciencia y la Tecnología.
Seguramente has utilizado, utilizas y/o utilizarás guantes a lo largo de tu vida, de diversas marcas y modelos, materiales y diseños, para proteger las manos del frío. La diferencia entre unos guantes y otros radica en su eficacia, no siendo siempre los resultados los deseados. ¿Alguna vez has tenido las manos heladas a pesar de llevar unos guantes puestos? ¿alguna vez has tenido los dedos de las manos tan entumecidos por el frío que no podías siquiera bajarte la cremallera y sacar la pirola para mear? ¿alguna vez te han dolido tanto los dedos de las manos por el frío como para preocuparte? Si la respuesta es afirmativa serás consciente de la importancia que tiene disponer de unos guantes que resulten eficaces a la hora de mantener las manos calientes y protegidas del frío.
La dificultad para fabricar unos buenos guantes para el frío no solo radica en proteger adecuadamente las manos, sino que además han de permitir que no queden totalmente anuladas al perder todo el tacto. De nada sirve que las manos estén calentitas y perfectamente protegidas del frío si con ellas no puedo hacer absolutamente nada. Es ridículo pretender portar y manejar un arma de fuego utilizando unos de guantes abultados que convierten las manos en muñones inútiles. Pues bien, entre la amplia variedad de guantes actualmente existentes en el mercado se encuentra la tercera generación de unos guantes que desde su origen han estado concebidos para atender las necesidades del combate con armas de fuego cuando el frío aprieta: los guantes HEAT 3 SMART, de The HEAT Company. (puedes encontrar algunos de sus productos directamente en Amazon).
Quién mejor que el propio fabricante para explicarnos el origen de estos maravillosos guantes:
Originalmente los guantes HEAT 3 se diseñaron para atender las necesidades de las unidades de operaciones especiales de Alemania, Spezialeinsatzkommandos (SEK), y de Austria, Einsatzkommando (EKO) Cobra. Vinieron a nosotros y nos dijeron que necesitaban unos guantes de una sola pieza que proporcionaran calor pero sin perder el tacto con las manos. Además se quejaban de la mala calidad de ciertos elementos del equipo militar, especialmente en el ámbito de los guantes/manoplas.
Entonces nos propusimos intentar fabricar el guante perfecto según los requisitos de las unidades de operaciones especiales. Junto con dos diseñadores de guantes austríacos empezamos el proyecto “HEAT3 Special Force”. Dichos diseñadores tenían mucha experiencia en el diseño de guantes para deportes de invierno y también de protección laboral.
Nuestra idea original fue dejar totalmente a un lado el “factor coste”. Mantuvimos muchas acaloradas discusiones durante el proceso de diseño. Al buscar alternativas válidas a los materiales o formas de diseño existentes en aquel momento nos percatamos que los diseñadores de guantes tienden a trabajar en una sola dirección excluyendo en algunas ocasiones automáticamente alternativas válidas sencillamente porque son perfectamente conscientes de los costes que pueden suponer (en términos de trabajo, material, etc.). De modo que la presión por querer diseñar un guante asequible siempre forma parte del proceso de diseño.
Nuestro papel consistió en dejar a un lado esa presión durante el proceso de diseño. La principal pregunta fue ¿por qué diseño optarías si no importaran los costes sino únicamente encontrar la mejor solución?
Todos los que formamos The HEAT Company nos criamos en los Alpes y aunque procedemos de diferentes ámbitos combinamos nuestra experiencia en campos tan diferentes como el esquí profesional, la travesía alpina, la enseñanza del esquí, la caza, etc. El resultado fueron nuestros guantes HEAT 3, una mezcla entre guantes y manoplas en una sola pieza de materiales de alta calidad para todo tipo de personas que padezcan las condiciones del frío extremo.
Como prueba del éxito de los guantes HEAT 3 tenemos las opiniones de muchos clientes: soldados, miembros de unidades de operaciones especiales, policías, montañeros, esquiadores, participantes en expediciones polares, etc.
Al tocar estos guantes por primera vez salta a la vista su concienzudo diseño y fabricación. Fácilmente se puede comprobar su eficacia con solo ponértelos en las manos. Desde luego se tomaron muchas molestias para ofrecer unos guantes que realmente se ajusten a las necesidades de un profesional o no de las armas y de cualquier otro ámbito. Allá donde el frío apriete estos guantes resultan una excelente opción para protegerse del frío sin perder la posibilidad de utilizar las manos para manipular cualquier herramienta.
Los guantes HEAT 3 SMART constituyen la tercera generación de los HEAT 3 e incluyen algunas mejoras en su diseño respecto a versiones anteriores como, por ejemplo, el hecho de contar en los dedos índice y pulgar de cada mano con un tejido especial compatible con las pantallas que utilizan actualmente multitud de dispositivos electrónicos (Smartphone, Tablet). Con ello se puede interactuar con la pantalla de muchos dispositivos que son parte fundamental del día a día de cualquier persona, tanto en el ámbito personal como en el profesional. No tiene que ser un problema proteger las manos frente al frío y atender una llamada de teléfono o ajustar el nivel de zoom en la pantalla del móvil mientras navegas. Cuando hace frío tienes que manejar todos esos dispositivos electrónicos y mejor poder hacerlo sin tener que quitarte los guantes.
En la fabricación de estos guantes solo se utilizan materiales y tejidos de primera calidad especialmente escogidos para cumplir con su cometido. Para evitar que los guantes abultaran excesivamente por utilizar un aislante voluminoso, como sucede con otros guantes, se optó por un tejido aislante que proporciona un gran aislamiento con poco volumen como es Primaloft®. Este tejido aislante cubre la superficie de la mano y se extiende hasta la muñeca para conservar mejor el calor. Además, la palma de la mano está completamente cubierta con piel de cabra, que protege del frío y permite un buen agarre. El interior de los guantes está fabricado a base de tejido de microfibras recubierto exteriormente por una membrana transpirable resistente al agua que evita en gran medida que la humedad acceda al interior.
La principal característica de diseño de estos guantes radica en su dualidad manopla-guante. En modo manopla la mano dentro del guante permanece completamente cubierta por todo el material aislante, perfectamente protegida del frío, pero sin posibilidad de utilizar los dedos, perdiendo por tanto capacidad para manipular cualquier herramienta. El paso a modo guante resulta tan sencillo como abrir la cremallera que atraviesa perpendicularmente la palma de la mano y sacar por ahí los dedos de forma que puedan utilizarse libremente para manipular cualquier herramienta. La parte de la manopla que cubría los dedos se dobla hacia arriba y hacia atrás quedando sujeta en su posición retraída por un simple botón-broche. Los dedos siempre quedan cubiertos por un guante interior de tejido de microfibras, de modo que al retirar la manopla no queden expuestos a la intemperie. Al pasar a modo guante se puede manipular con cierta soltura cualquier cosa, incluidos el fusil y la pistola, pudiendo realizar, por ejemplo, manipulaciones tales como cambios de cargador, lo que no sería posible en el modo manopla.
Estos guantes disponen de dos elásticos ajustables que permiten ceñir el guante a la muñeca y garantizar una mayor estanqueidad que impida que entre el aire frío o la humedad. Uno de los elásticos se encuentra justo entre la mano y la muñeca y el otro sobre el antebrazo 10cm más arriba del primero. Ambos pueden apretarse y aflojarse fácilmente con la otra mano.
Una de esas características de estos guantes que no por su sencillez deja de ser tremendamente útil son las «cintas de seguridad salva-guantes», que permiten entre otras cosas evitar desafortunados accidentes como, por ejemplo, que alguno de los guantes caiga en el típico pozo sin fondo que se puede encontrar en un váter químico cuando uno se quita los guantes para poder manipular adecuadamente cierta herramienta. Estas cintas unen los guantes a una pulsera elástica que se coloca en torno a la muñeca antes de ponernos los guantes de forma que al soltar los guantes queden colgando de las muñecas. Si prefieres no utilizar estas cintas puedes desmontarlas fácilmente para volver a montarlas en cualquier otro momento. Los guantes también disponen de una pequeña argolla exterior que puede utilizarse para engancharlos en un mosquetón cuando no se utilicen.
Por otra parte, por si el aislante térmico (Primaloft®) del forro de estos guantes no fuera suficiente para mantener las manos calientes estos guantes disponen de un bolsillo sobre el dorso de la mano, justo encima de los dedos, al que se accede a través de una cremallera, en el que se puede introducir uno de esos calentadores/almohadillas térmicas de la propia marca The HEAT Company. Dichos calentadores/almohadillas térmicas constituyen otro de los productos estrella de esta marca y no es para menos.
Estos guantes, HEAT 3 SMART, se pueden adquirir directamente en España por 140€ ─envío incluido─ a través de la propia página web de su fabricante (página web disponible incluso en español, lo que facilita las cosas a la hora de realizar el pedido) o en Amazon. Están disponibles en 5 colores (beige, marrón, verde, gris, negro) y en 6 tallas (6, 7, 8, 9, 10, 11). Para pedidos con un valor superior a 25 €, como sería este caso, los gastos de envío son gratuitos a través de UPS. Sin moverte de tu asiento puedes tenerlos en casa en sólo unos días.
Aunque quizás el precio de estos guantes puede resultar excesivo, no se puede negar que «pagas por lo que obtienes» y en cuanto a protegerse del frío, ¿cuánto estás dispuesto a pagar? «Nadie da duros a tres pesetas» y en este caso la calidad, tanto en el diseño como en los materiales y la fabricación del producto, parece ajustarse a su precio.
Por otra parte, The HEAT Company ofrece una amplia variedad de calentadores/almohadillas térmicas para adaptarse a diferentes situaciones. Estos calentadores/almohadillas térmicas consisten sencillamente en una bolsita, elaborada con un tejido poroso que permite el paso del aire, en cuyo interior se encuentra una mezcla de materiales 100% naturales y no tóxicos, principalmente vermiculita y carbón activo. Esta mezcla reacciona al contacto con el aire desprendiendo calor (entre 40ºC y 68ºC según el producto), lo que indica la forma de uso de los calentadores/almohadillas térmicas. Basta sacar el paquete de su embalaje de plástico y dejar que entre en contacto con el aire durante unos minutos para que se inicie una reacción química de oxidación por la que desprende calor durante horas (entre 6 y 20 horas o más según el producto). Al no contener ningún producto tóxico se puede tirar normalmente a la basura una vez utilizado. Asimismo se puede almacenar durante varios años sin perder propiedades si no se saca de su embalaje.
Las aplicaciones de estos calentadores/almohadillas térmicas son ilimitadas, no sólo para combatir el frío sino para tratar alguna lesión muscular o mantener el equipo electrónico caliente en su bolsa de transporte. Existen múltiples formatos disponibles para adaptarse a múltiples aplicaciones:
- Calientapiés (un par por unidad): especialmente diseñado para calentar los pies; cada bolsita dispone de un lado adhesivo para pegar la bolsita al calcetín o calzado; proporciona 40ºC durante más de 6 horas; con un precio según número de unidades entre 1,99€/ud (hasta 9 uds) y 1,00€/ud (más de 320 uds).
- Calientamanos (un par por unidad): especialmente diseñado para calentar las manos; cada bolsita de 9x6cm puede introducirse dentro de los guantes o de los bolsillos del pantalón/chaqueta; proporciona 40ºC durante más de 12 horas; con un precio según número de unidades entre 1,99€/ud (hasta 9 uds) y 1,00€/ud (más de 320 uds).
- Calentador lumbar XL (tres por unidad): especialmente diseñado para la zona lumbar; cada bolsita de 20x13cm dispone de un lado adhesivo para pegarla sobre la ropa (nunca en contacto con la piel); proporciona una media de 51ºC y un máximo de 63ºC durante más de 18 horas; con un precio de 9,95€/ud.
- Calentador cervical (tres por unidad): especialmente diseñado para la zona cervical; cada bolsita de 10x13cm dispone de un lado adhesivo para pegarla sobre la ropa (nunca en contacto con la piel); proporciona una media de 51ºC y un máximo de 63ºC durante más de 18 horas; con un precio de 6,95€/ud.
- Calentador de cuerpo (uno por unidad): especialmente diseñado para calentar el cuerpo; cada bolsita de 10x13cm dispone de un lado adhesivo para pegarla sobre la ropa (nunca en contacto con la piel); proporciona una media de 51ºC y un máximo de 63ºC durante más de 12 horas; con un precio según número de unidades entre 2,32€/ud (hasta 9 uds) y 1,49€/ud (más de 40 uds).
- Multicalentador (uno por unidad): especialmente diseñado para mantener cualquier cosa caliente durante todo el día (por ejemplo, el equipo electrónico dentro de su bolsa de transporte, el saco de dormir, …); cada bolsita de 9x13cm proporciona una media de 51ºC y un máximo de 63ºC durante más de 20 horas; con un precio según número de unidades entre 1,99€/ud (hasta 9 uds) y 1,39€/ud (más de 40 uds).
- Calientapiés para plantillas (un par por unidad): especialmente diseñados para su uso con todas las plantillas YETI de la propia marca, que disponen de un espacio en su interior para colocar esta bolsita; proporciona 40ºC durante más de 6 horas; con un precio según número de unidades entre 2,32€/ud (hasta 9 uds) y 1,49€/ud (más de 40 uds).
Todos los calentadores/almohadillas térmicas de The HEAT Company se pueden adquirir directamente a través de su página web con unos gastos de envío de tan sólo 2,90€ (gastos de envío gratuitos para pedidos de más de 25€). ¡Con The HEAT Company todo son ventajas!
Gracias al apoyo y buena voluntad de The HEAT Company, que nos ha proporcionado una muestra de estos guantes HEAT 3 SMART, así como un lote completo de calentadores/almohadillas térmicas, hemos podido comprobar por nosotros mismos las excelentes propiedades de estos productos. Les agradecemos sinceramente el detalle, especialmente a Elke Holzer.
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Supongo que los que sabéis lo que es el frío de verdad apreciáis mejor que nadie lo que son unos buenos guantes. Uno no es consciente de lo necesario que es invertir en unos buenos guantes para el frío hasta que le duelen los dedos y desearía tener unos buenos guantes.
he comprado estas manoplas guantes y son lo mejor que me he podido encontrar para ambientes invernales lo recomiendo de verdad