Nosotros no teníamos ninguna duda desde un principio de la utilidad del simulador de tiro de realidad virtual ACE como Sistema de Entrenamiento de Tiro realista y aseguible sin salir de casa. Alguien tenía que comprobar cómo se trasladaba esa utilidad al entrenamiento de policías y Ramón lo ha conseguido con la nota más alta. En este artículo nos cuenta su experiencia al detalle, y la de sus compañeros que lo han disfrutado.
TIRO EN SECO 3.0: La Búsqueda de la Excelencia.
Por Ramón Tobaruela Lana.
Desde la asociación FALCATA, a la que pertenezco, y también antes de unirme a ella, he venido impartiendo cursos de lo que popularmente se denomina Tiro en Seco. No es un concepto nuevo ni revolucionario, salvo por el hecho de que, de un tiempo a esta parte, no he dejado de incorporar nuevas herramientas de enseñanza a estos cursos, buscando siempre la excelencia.
La Evolución de las Herramientas
Al principio, todo se limitaba a pequeñas ayudas: alguna varilla de seguridad, cartuchos inertes y, desde la llegada de las impresoras 3D, cargadores para dejarlos caer al suelo. Poco más.
Poco a poco, esas primeras herramientas se fueron complementando con infinidad de dispositivos y accesorios. Algunos útiles, como las maravillosas pistolas SIRT, y otros no tanto. Hablamos de sistemas láser, blancos electrónicos, aparatos de gimnasia, cuerdas de Brock, Fusion TM y, finalmente, simuladores de tiro. Todo lo que considero que puede ser útil, lo adquiero y lo aplico.
La Apuesta por la Realidad Virtual
El primer simulador que pudimos comprar, usar y exprimir fue el Smokeless Range de Laser Ammo, el cual he llevado a muchas plantillas de Aragón con buenos resultados y sigo utilizándolo. Sin embargo, hace ya un año y medio, tras discutir su futura y supuesta proyección con Jorge ─el creador de este blog─ y compararlo con otros simuladores similares (Octopus, GAIM), decidí darle una oportunidad al Simulador de tiro de realidad virtual ACE y adquirir este dispositivo.
La verdad es que no lo tenía muy claro. El hecho de ser un sistema de membresía ─que requiere un pago anual o mensual para renovar el acceso al programa─ me parecía, en principio, un punto en contra, a pesar de que ese dinero asegurase continuas actualizaciones. Además, tener que comprar unas gafas de realidad virtual Meta Quest se me antojaba un lujo exótico.
Tras un año de uso personal y después de más de 100.000 disparos virtuales, me he decidido a realizar una prueba intensiva para ver hasta dónde puede llegar el dispositivo y si puede ser otra buena herramienta de enseñanza, o incluso un complemento útil para plantillas pequeñas.
Prueba Intensiva con Alumnos
Dentro de una formación continua anual mucho más amplia que desarrollamos en el Sindicato de Trabajadores del Ayuntamiento de Zaragoza (STAZ), con clases mensuales para un grupo de unos 30 alumnos, decidí organizar durante 5 días una hora de uso de este simulador con cada alumno para probar el comportamiento del simulador de tiro ACE con este uso intensivo.
El Equipo Material
El equipo material necesario para montar el simulador de tiro ACE no puede ser más sencillo:
- Unas gafas Meta Quest 2, la versión ─ya descatalogada─ más asequible de estas gafas VR.
- Una correa BOBOVR para las gafas, que mejora su comodidad.
- Dos baterías BOBOVR para alargar las horas de uso autónomo, más un cargador.
- Un cable USB-C para tener las gafas cargando mientras se usan, que finalmente no fue necesario usar.
- Un poco de gel hidroalcohólico y papel para limpiar las gafas de vez en cuando.
- Un espacio diáfano, para poder moverse con libertad sin peligro de colisiones.
- Un PC que completa el equipo.
- Y, puestos a hacerlo bien, una pantalla de TV de grandes dimensiones que me permite alejarme para corregir pequeños detalles sin perder de vista lo que sucede en el escenario.
- Una réplica inerte de la pistola que portan de servicio los alumnos, en este caso Glock G19, gracias a la bendita impresora 3D y al módulo de disparo de ACE.
Resultados de la Prueba Intensiva
Vamos al grano: ¿qué tal se ha comportado el equipo? ¿ha tenido fallos de autonomía o de software?
La respuesta es no. No ha podido ir mejor. Se pudieron encadenar cinco sesiones continuas por la mañana y cuatro por la tarde, con solo cinco minutos de descanso entre tiradores, lo justo para cambiar la batería, limpiar las gafas y volver al principio de la sesión.
Todos comenzaron en el menú principal con una Glock con miras abiertas tradicionales, realizando los ejercicios Skills que ofrece el simulador de tiro ACE. Primero, el ejercicio de Accuracy, disparando a una chapa metálica de 12cm de diámetro y comprobando que, a partir de 20 yardas, acertar comenzaba a ser difícil. Pocos, o ninguno, superaron las 25 yardas. Practicaron los fundamentos, cambiaron de blancos, eligieron entre disparar o no hacerlo, e incluso «cortaron la tarta» al entrar en una habitación.
Una vez familiarizados con el simulador, volvieron a la zona inicial y equiparon su arma con un visor de punto rojo, volviendo a realizar el primer ejercicio. El cambio fue espectacular: todos superaron el límite de 20 yardas que inicialmente se les atragantaba, llegando incluso al límite de 40 yardas sin demasiados problemas.
Comprobaron y se convencieron de que los visores son el presente, que facilitan la puntería, simplifican la toma de decisiones y aumentan considerablemente el rango de uso de una pistola, doblando su alcance eficaz. Y todo esto sin disparar un solo tiro real, ni tener que adquirir un visor de verdad. Aunque eso, intuyo, va a cambiar muy pronto.
Continuaron los ejercicios con esta nueva configuración de la pistola, realizando distintas prácticas más o menos complicadas, dependiendo del nivel de manejo que demostraban. La hora se les pasó a todos volando y, según decían, quedaron impresionados con el realismo del sistema y sufrieron al día siguiente las correspondientes agujetas en antebrazos y dedo índice.
Conclusiones
El simulador de tiro de realidad virtual ACE, a pesar de estar diseñado para un uso individual y privado, responde perfectamente ante un uso colectivo e intensivo.
Comportamiento Técnico y Autonomía
Estabilidad del Software: no se presentaron fallos de software significativos, salvo por detalles menores, como alguna «calabaza rota» que aparecía al cambiar de escenarios y no se borraba (sin afectar el desarrollo del ejercicio).
Fallos Mínimos: en una ocasión, los disparos de un ejercicio concreto no impactaban, lo cual se solucionó simplemente saliendo y volviendo a entrar al programa. Este es un incidente menor, propio de la informática, que apenas supuso un minuto solucionarlo y no volvió a presentarse.
Baterías y Autonomía: las baterías aguantaron a la perfección. Solamente hubo que ir cambiándolas cada hora mientras se cargaban en el cargador. El uso del cable para tener las gafas cargando mientras se usaban no fue necesario, aunque se comprobó su comodidad en una de las sesiones. No interfiere en absoluto en ejercicios estacionarios, pero sí en aquellos que requieren escenarios de 360°, ya que el el cable se acaba enrollando en torno al tirador. Hay que vigilar que entre las sesiones de la mañana y la tarde, la batería principal de las gafas se cargue completamente, ya que por debajo del 20% se agota rápidamente, aún cuando esté conectada al cable auxiliar o a la batería de apoyo.
Impacto y Viabilidad
Mantenimiento de Habilidades: es un hecho probado que el simulador ACE es capaz de mantener las habilidades de tiro con un uso personal sin disparar un solo tiro de fuego real (campeones mundiales de tiro, como Max Michel o J.J. Racaza, lo utilizan regularmente).
Entrenamiento Visual: el trabajo visual es una parte muy importante del tiro, y con ACE se puede reproducir al 100%.
Complemento y Ahorro: esto no sustituye la necesidad de refrendar las sesiones periódicamente con fuego real, pero sí permite reducir significativamente la frecuencia de esas sesiones y, por lo tanto, gastar mucho menos dinero en munición.
Uso Colectivo: esta prueba abre un campo de uso más amplio y por su precio, comparado con otros simuladores, no sería descabellado que plantillas pequeñas pudieran adquirir un solo simulador ACE para la práctica regular de sus policías. Sin embargo, en plantillas grandes, donde se superan las 15 o 20 personas, serían necesarios varios simuladores ACE. Con una mínima inversión y un cuidado adecuado, el simulador de tiro ACE puede ser una solución muy acertada para el entrenamiento continuo de cualquier plantilla.
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