En memoria de Jesús. Logroño (La Rioja). 27 de marzo de 2020.


España está de lutoHay enemigos que atacan sigilosamente sin que te des cuenta siquiera, cuando menos te lo esperas, fuera de cualquier zona de operaciones, en tu propia casa. Este es el caso que nos ocupa, el coronavirus, que ya se ha llevado por delante a varios compañeros. Lamentablemente a la lista de compañeros caídos se suma hoy, 27 de marzo de 2020, Jesús, que tras 10 días ingresado en la UCI ─luchando contra el virus─, fallece en Logroño a sus 48 años.

Fallece el teniente coronel del GAR, Jesús Gayoso, por coronavirus. Voz Populi. 27 de febrero de 2010.

Jesús Gayoso Rey era teniente coronel de la Guardia Civil, destinado como jefe del Grupo de Acción Rápida (GAR), en Logroño (La Rioja), desde 2014. Dedicó toda su vida a defender a su Patria y eligió combatir el terrorismo desde su ingreso en la Guardia Civil en 1996. Los que le conocían le consideran un líder al que mirar con admiración, por sus cualidades personales y profesionales. Predicó con el ejemplo y deja un enorme legado de buenas personas y profesionales en la unidad que mandaba, en el GAR, donde le apreciaban sinceramente. Ellos acreditan la valía de Jesús, como un líder al que seguir hasta donde haga falta. Hoy nos deja a la espera de que su unidad vuelva a reunirse con él en ese lugar al que solo van personas como él.

Uno de los hombres que estaban a sus órdenes, Juan Ignacio Carrión quiere dedicarle estas palabras a su Jefe en el GAR:

Siempre se van los buenos…

Hace menos de 15 minutos que me he enterado de la noticia de su muerte. Estoy desolado. Se va un buen oficial, un gran líder y para muchos, un amigo. Tal vez no fuera el mejor oficial de la Guardia Civil, pero seguro que era el jefe que el GAR necesitaba. Por su sangre corría el espíritu de los hombres que conforman esta Unidad hasta niveles de obsesión, viviendo para y por el GAR en todo momento.

Deja mujer y dos hijos, a los que les doy mi más sentido pésame. Y deja una familia de muchos subordinados que ahora mismo estamos en shock, siendo lo peor de todo que no podemos velarle como se merece un líder de su categoría. Algún día lo haremos, cuando este virus que nos tiene aislados y desolados sea derrotado, y entonces demostraremos a España la calidad que tenía como persona y como miembro del GAR.

Estuve a sus órdenes a mi llegada a la Unidad, varios años llenos de grandes anécdotas que quedan para aquellos que lo vivimos. A mi regreso al Grupo después de mi tiempo en los EE.UU, recuerdo sus palabras: “necesitamos a tíos como tú en la unidad, no solo veteranos, sino que sepan cómo y porqué se hacen las cosas”. Aprendió con los años que el respeto se gana, no se impone, y que tener colaboradores era mejor que tener subordinados… Eso es lo que lo hacía ser mejor que otros.

Hace cuatro semanas justas estuve con él en Holanda, varios días juntos, trabajando para un proyecto europeo que era su máxima preocupación. Al final de una jornada, tomando unas cervezas, nos hablaba con emoción de las ganas que tenía de hacer la “Valvanerada” (romería de 63 km) con todo el Grupo junto. Iba a destinar el dinero recaudado para el hijo de un compañero que sufre una enfermedad grave. Siempre se ocupó de los suyos, ahora nos toca a nosotros ocuparnos de él.

Descanse en Paz, mi Teniente Coronel. Nos veremos en el otro lado.

Juan Ignacio Carrión Gutiérrez,
Guardia Civil en el GAR, compañero y subordinado del TCol Jesús Gayoso

 

Lo demandó el honor y obedeció,
lo requirió el deber y lo acató;
con su sangre la empresa rubricó,
con su esfuerzo la Patria engrandeció.
Fue grande y fuerte, porque fue
fiel al juramento que empeñó.
Por eso como valiente luchó,
y como héroe murió.
Por la Patria morir fue su destino,
querer a España su pasión eterna,
servir en la Guardia Civil su vocación y sino.
No quiso servir a otra Bandera,
no quiso andar otro camino,
no supo vivir de otra manera.
¡Viva España!

Jesús lamento sinceramente tu pérdida y me entristece profundamente la noticia de tu muerte. Ya sabes que en nuestra Familia, las Fuerzas Armadas y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, toda pérdida de un Hermano de Armas la sentimos en el alma. ¡Gracias por todo!

¡Jesús, que Dios te bendiga!

¡Descansa En Paz, Hermano de Armas!

Quisiera aprovechar estas líneas para transmitir mis más sentidas y sinceras condolencias a todos los familiares, compañeros y amigos de Jesús y enviarles todo el ánimo que estas sencillas líneas puedan transmitirles.

 

(El que así lo desee puede sumarse a este pequeño homenaje escribiendo unas palabras en los comentarios)

 

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