Un FUSA apto para el consumo español: ISSC MK22.

En el siguiente enlace puedes disponer de este mismo artículo en formato PDF: Un FUSA apto para el consumo español: ISSC MK22, por Jorge Tierno Rey.

El acrónimo SCAR se corresponde con la denominación Special Operations Forces Combat Assault Rifle o, lo que es lo mismo pero en español, Fusil de Asalto de Combate de Unidades de Operaciones Especiales (más o menos), y comprende un fusil de asalto (FUSA) diseñado por la casa FN Herstal a requerimiento del Mando de Operaciones Especiales de EE.UU. (USSOCOM). Este FUSA constituye uno de los mejores de la historia y dadas sus excelentes características y rendimiento se ha convertido en un bien muy preciado en el mercado civil en EE.UU. a pesar de su elevado precio.

El SCAR nunca podrá estar disponible en el mercado español en sus versiones 16 o L (5’56×45 mm. NATO) y 17 o H (7’62×51 mm. NATO) debido a las restricciones impuestas por el vigente Reglamento de Armas. Sin embargo, podría llegar el día en el que estuviera disponible en calibres como el .222 Remington o el .307 Winchester, pero tanto el precio del arma como el de la munición lo harían totalmente prohibitivo para muchos.

La solución para todos aquellos que deseen disponer no sólo de un FUSA sino de un cuasiauténtico SCAR a un precio realmente asequible llega de la mano de la marca austríaca ISSC con su fusil MK22, actualmente disponible tanto en color negro como en el color arena propio del diseño original para el USSOCOM. La denominación completa con la que la marca ha bautizado a este fusil es Modern Sporting Rifle (MSR) MK22, de lo que fácilmente se puede deducir que el calibre de este arma es el .22 LR y que su mercado de destino es el del tiro deportivo.

En el verano de 2010, durante el evento Aimpoint Live Fire Days 2010, tuve el honor y el grandísimo placer de disparar tanto el SCAR-L como el SCAR-H, en sus diferentes longitudes de cañón, y no pude hacer otra cosa más que enamorarme de este increíble FUSA. Lo que más me convenció fue la facilidad para empuñar el fusil y absorber el retroceso, incluso en el caso del calibre 7’62×51 mm. NATO. Desde entonces no he dejado de pensar que sería maravilloso que existiera un SCAR en calibre .22 LR a un precio lo suficientemente ajustado para todos los bolsillos, lo cual ha llegado con el MK22.

Gracias al distribuidor en España de la marca ISSC, Borchers S.A., que me ha facilitado un ejemplar de prueba y evaluación del MK22, he podido comprobar por mi mismo las virtudes de este eficiente fusil. Digo eficiente porque por relativamente poco dinero se le puede sacar mucho partido y diversión a este fusil. Su precio de venta al público recomendado (PVPR) asciende a la ajustada cifra de 614 € y el precio de una caja de 100 disparos calibre .22 LR Hyper Velocity es de unos 10 €.

El parecido del MK22 con el SCAR auténtico es asombroso y además dispone de muchas de sus características que le confieren un importante valor añadido, tales como su ergonomía, que permite conseguir un empuñe y un encare magníficos, o la disponibilidad de serie de miras de respeto o de emergencia (Back Up Iron Sights), que supondría un desembolso adicional importante en el caso de no disponer de ellas como ocurre con otros fusiles.

Existen ya muchos artículos en los que se realiza un análisis detallado de este arma, por lo que no pretendo reiterar lo mismo y trataré de ceñirme más a los aspectos prácticos de este arma y su similitud con el SCAR original.

Lo que constituye un hecho curioso de este fusil es que en el lado izquierdo del cajón de mecanismos del fusil se puede leer la inscripción “DESIGN BY ESC. MADE IN GERMANY FOR ISSC”, lo que quiere decir que el diseño, ingeniería y fabricación del fusil han sido realizados por la empresa ESC para la austríaca ISSC en su sede de Ulm (Alemania), donde comparte instalaciones con el mundialmente conocido fabricante de armas Anschutz.

En lo que respecta a forma y dimensiones SCAR y MK22 las comparten casi exactamente. Algunas ligeras diferencias entre ambas armas son inevitables y se corresponden con la munición empleada. De esta forma, como es lógico y razonable, el tamaño de la ventana de expulsión varía entre ambas armas, tal y como se puede apreciar en la imagen 3. Sin embargo, las dimensiones del cargador y su brocal son muy parecidas a pesar del diferente tamaño de la munición. Existe una pequeña diferencia, prácticamente inapreciable, en lo que al cargador se refiere, que no es más que la mayor longitud (apenas un centímetro, aproximadamente) del cargador del MK22 respecto al del SCAR, tal y como se puede apreciar en la imagen 3. Algunos detalles han sido cuidados hasta el extremo, como es la pieza que se ubica en el exterior del cajón de mecanismos justo detrás de la ventana de expulsión (deflector), cuya finalidad es desviar de la cara del tirador las vainas expulsadas; ambas piezas son prácticamente idénticas en ambas armas.

El MK22 está disponible en dos longitudes de cañón, 16 y 12 pulgadas, aunque se trata de dos modelos diferentes y no de cañones intercambiables como sucede con el SCAR. El SCAR original está disponible con cañón de 14’5 (versión Standard) o 10 (versión CQC) pulgadas para el modelo SCAR-L (5’56 mm.) y con cañón de 16 (versión Standard) o 13 (versión CQC) pulgadas para el modelo SCAR-H (7’62 mm.). El cañón del MK22 viene provisto de una bocacha totalmente innecesaria técnicamente para el calibre .22 LR pero que le da un aspecto estético muy realista que lo acerca aún más a su homólogo SCAR, aunque sus bocachas son diferentes (la del MK22 es cerrada con 6 aberturas y la del SCAR es abierta con tres dientes, tal y como se puede apreciar en la imagen 3).

Al igual que sus homólogos SCAR para el mercado civil el MK22 es un fusil semiautomático. Su funcionamiento resulta impecable con prácticamente cualquier munición del calibre .22 LR siempre y cuando ésta sea High Velocity o Hyper Velocity, ya que la Standard puede producir algunas interrupciones, aunque también se puede disparar con este arma. Este matiz viene claramente advertido en la inscripción que se puede leer en la parte superior del lado derecho del cajón de mecanismos, donde dice “cal.22LRHV”. Hay que tener especial cuidado con el consumo de munición porque disparar con este fusil resulta tan agradable que la munición se esfuma en cuestión de segundos, aunque el precio es tan asequible que no supone una ruina pasar toda una tarde disparando.

La calidad tanto del diseño como de los materiales del MK22 salta a la vista en cuanto se empuña el arma. La parte superior del cajón de mecanismos está fabricada íntegramente en aluminio e incluye un raíl Picatinny que la recorre de principio a fin, también en aluminio, lo cual no resulta muy habitual en este tipo de fusiles (en el S&W MP15-22 es de plástico). Asimismo, el plástico utilizado en otras partes del arma es de gran calidad y parece muy robusto.

Tal y como su homólogo SCAR el MK22 también dispone de raíles Picatinny tanto en ambos lados del guardamanos como en su cara inferior, pero en su caso éstos son de plástico y no de aluminio. Además, la longitud de los raíles laterales es mayor que en el caso del SCAR, lo cual no constituye ningún inconveniente ni altera en exceso la similitud entre ambas armas.

Por otra parte, el pistolete de ambas armas parece ser exactamente igual en todos sus aspectos, tal y como se puede apreciar en la imagen 3. Resulta bastante cómodo y agradable al tacto, tanto con la mano desnuda como con guantes.

Una de las características diferenciadoras del SCAR es su culata, que además de ser extensible (6 posiciones) dispone de una carrillera ajustable y se puede plegar sobre el lado derecho del arma. Lo mismo sucede con la culata del MK22, prácticamente idéntica a la de su homólogo pero con la mitad de posiciones en lo que a extensión se refiere (3 posiciones) (ver imágenes 9 y 11). En ambas armas su culata constituye un importante punto a su favor, ya que facilita un empuñe correcto del arma y al encontrarse perfectamente alineada con el eje del cañón contribuye así a reducir la reelevación del arma tras cada disparo, aunque en el caso del .22 LR el retroceso es lo suficientemente liviano como para que no suponga tanto problema como en otros calibres más poderosos. Este es un valor añadido considerable ya que una culata similar tiene un coste bastante elevado y no suele ser una opción de serie.

En ambas armas la palanca de montar es intercambiable entre el lateral derecho y el lateral izquierdo, es decir, se puede instalar a voluntad en uno u otro lado (normalmente el izquierdo para los diestros y el derecho para los zurdos). En el caso del MK22 la palanca de montar puede alojarse en tres posiciones diferentes en cada lateral del arma, lo cual no sucede así en el SCAR. No obstante, de estas tres posiciones la central es la que parece ajustarse más a la del auténtico, tal y como se puede apreciar en la imagen 3.

Otro importante valor añadido del MK22, al igual que su homólogo, son los puntos de anclaje para las anillas de la correa portafusil (ver imágenes 6 y 8). En ambas armas se dispone de dos puntos de anclaje agujereados en una misma pieza de metal que se encuentra entre el cajón de mecanismos y la culata, sobresaliendo ambos puntos de anclaje, uno encima del otro, por el lado izquierdo del fusil. Asimismo, en la parte delantera del arma, justo al final del guardamanos, existe otra pieza de metal en la que se encuentran agujereados otros dos puntos de anclaje, uno a cada lado del arma.

Ambas armas también disponen de serie de alza y punto de mira abatibles (ver imagen 13), que constituyen unas miras de respeto o de emergencia (Back Up Iron Sights) que normalmente irán en su posición abatida para no interferir la puntería a través del visor, pudiendo levantarse en caso necesario por fallo del visor. Estas miras no son habituales en otros fusiles y su carencia exige realizar un desembolso económico adicional si se quiere disponer de ellas. Por tanto, éste es otro punto a favor de este arma.

Tanto el botón de la retenida del cargador como la aleta selectora del seguro son ambidiestras o más correctamente se encuentran duplicadas, una en cada lado del fusil, de forma que pueden accionarse desde ambos lados del cajón de mecanismos (ver imagen 11). Esta característica es propia del SCAR y también se encuentra en el MK22, aunque no es habitual en otros fusiles. Asimismo, el botón de la retenida del cargador dispone de un cerco a su alrededor para evitar que se pueda pulsar involuntariamente, ¡todo un detalle por su parte! Dónde si existe alguna diferencia es en la aleta selectora del seguro, siendo una pieza más pequeña en el SCAR. En el caso del MK22 la manipulación de esta aleta resulta un tanto dificultosa con el pulgar de la mano fuerte ya que las dos posiciones posibles de dicha aleta se extienden con un ángulo de 45º hacia arriba (posición de seguro) o hacia abajo (posición de fuego), aunque no plantea demasiados inconvenientes tras un poco de práctica para acostumbrarse a ella. Lo que si es de agradecer es que los movimientos para llevar la aleta a las posiciones de seguro y fuego coinciden con otros fusiles, de forma que levantando el pulgar se activa el seguro y bajando el pulgar hacia su posición de empuñe correcto se dispone el arma para abrir fuego.

En cuanto a los cargadores (ver imagen 10), como es natural, la capacidad de los del MK22 difiere de la de los de su homólogo, siendo de 22 disparos en su caso y 30 en el del SCAR. Estos cargadores disponen de indicador de carga en ambos laterales, que consiste simplemente es un grabado con una marca que va de 2 en 2 desde el 4 hasta el 22, que sirve como referencia para la guía de la teja elevadora y así indicar el número de cartuchos que quedan en el cargador.

Como no podía ser de otra manera la similitud entre ambas armas no logra equiparar el peso de las mismas. Creo que fundamentalmente son el cañón y el cierre los culpables de esta diferencia de peso, ya que no es lo mismo un calibre .22 LR que un calibre 5’56×45 mm. Tampoco es una característica excesivamente relevante, al fin y al cabo la diferencia es de poco más de medio kilo (el MK22 peso 3 kg. y el SCAR 3’5 kg.), e indudablemente, una vez se empuña el fusil, esta diferencia de peso no le resta ni un ápice de realismo al MK22, ¡realmente parece un auténtico FUSA!

Si hubiera que buscarle alguna pega a nivel práctico y funcional al MK22 ésta podría ser única y exclusivamente la ausencia de un pulsador para liberar la retenida del cierre, que sí existe en su homólogo. De todas formas, esto no supone un gran inconveniente ya que para liberar el cierre una vez éste quede retenido atrás al agotar la munición del cargador (recarga rápida o de emergencia) basta con accionar la palanca de montar, tal y como sucede en otros FUSAs como el HK G36.

No dispongo de datos tales como precisión (dimensiones mínimas de la agrupación), alcance máximo eficaz, velocidad en boca de fuego, …, que siempre me resultan excesivamente técnicos para mi, pero sí puedo afirmar sin ningún género de dudas que el rendimiento de este fusil está a la altura de cualquier otro similar y sus limitaciones vienen impuestas simplemente por el calibre del arma. En mi opinión los mejores resultados se consiguen con cualquier munición de calidad en calibre .22 LR Hyper Velocity. Si bien puede dispararse cualquier marca de munición la baja calidad de la misma puede ser una fuente de problemas, principalmente incómodas interrupciones del arma, como en cualquier otro arma. Sin lugar a dudas la calidad de este arma bien merece invertir un poco más de dinero en munición de calidad.

En resumidas cuentas, si lo que estás buscando es un pseudoFUSA eficaz y de calidad en calibre .22 LR ésta es una de tus mejores opciones. Si además admiras la estética y funcionalidad de un auténtico SCAR ésta es tu única y mejor opción para tenerlo entre tus manos sin necesidad de ser rico.

(Vaya mi especial agradecimiento al señor Rudy Borchers por haberme facilitado un MK22 de prueba y evaluación para la elaboración de este artículo y a un hermano de armas por haber realizado las gestiones pertinentes para que así fuera.)

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(Este artículo fue publicado en la web www.armas.es el 19DIC11. Puedes consultarlo en ESTE ENLACE)

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