La Importancia de la Formación con las Armas de Fuego. Por Tiger McKee.

Por si no fuera ya lo suficientemente evidente la importancia que tiene recibir  formación de calidad en el arte marcial del combate con armas de fuego te traemos un artículo escrito por Tiger McKee y publicado el 27 de marzo de 2013 en la web American Rifleman de la National Rifle Association (NRA) que quizás te resulte interesante. No descubre nada nuevo ni resulta innovador en su contenido, sino que simplemente viene a reiterar lo ya conocido por todos respecto a la importancia que tiene la instrucción y/o adiestramiento.

(Artículo traducido y publicado con la autorización de su autor original)

Puede parecer una afirmación atrevida pero tras 20 años como instructor de tiro creo firmemente que cualquiera, independientemente de cuánto tiempo haya dedicado en su vida a las armas de fuego, puede beneficiarse de su asistencia a cualquier tipo de curso de formación con armas de fuego. A los nuevos tiradores se les presenta un mundo previamente desconocido de técnicas para utilizar un arma de fuego correctamente y de forma segura. Los tiradores más experimentados descubren nuevas técnicas al mismo tiempo que afinan y pulen las ya existentes. Si tienes un arma de fuego necesitas formación.

El tipo de cursos de formación a los que deberías asistir, y a cuántos cursos, lo dicta el uso previsto de tu arma de fuego. Los fines deportivos ─tiro deportivo o caza─ exigen que sepas cómo manejar un arma de fuego de forma eficaz y con seguridad. Sin embargo, los fines defensivos requieren un conjunto de técnicas completamente diferentes. Una cosa es evitar desde detrás de una cubierta o parapeto que un intruso avance hacia ti por el pasillo de tu casa. Todo el que porta un arma de fuego para su defensa personal puede enfrentarse a situaciones que requieran un conjunto diferente de técnicas. Los profesionales armados requieren un conocimiento adicional para su trabajo en particular.

La mayoría de técnicas necesarias para manejar un arma de fuego con éxito no resultan naturales o instintivas; tanto los aspectos mentales como los físicos del manejo de un arma de fuego son en su mayor parte contraintuitivos. Con suficiente tiempo y munición podrías llegar a descubrir estas técnicas por ti mismo, pero la forma más eficaz de adquirir este conocimiento es asistir a un curso de formación.

Un curso básico da a conocer los fundamentos sobre el uso de un arma de fuego ─seguridad, puntería y manipulación─. Los principios básicos del tiro ─postura/posición, empuñe, puntería y control del disparador─ se aplican a todo tipo de tiro. Por ejemplo, con los elementos de puntería (alza y punto de mira) tu enfoque visual se centra en el punto de mira, no sobre el blanco, que es lo que de forma natural queremos enfocar. Presionas el disparador suavemente sin anticipar el retroceso y desbaratar la imagen de los elementos de puntería. Tras el disparo reseteas el disparador, permitiendo que el disparador avance sólo lo suficiente para resetear el martillo y el fiador. El reseteo del disparador*, una técnica que incluso tiradores de toda la vida normalmente pasan por alto, incrementa la precisión y resulta clave para realizar múltiples disparos con eficacia.

*Nota del traductor: el reseteo del disparador es algo ampliamente conocido, practicado y recomendado por muchos grandes maestros, llegando a atribuir a esta técnica gran parte del éxito de cada disparo. Esta técnica se centra sobre el principio básico del tiro relativo al control de disparador, principio que se considera como el más importante a la hora de lograr buenos resultados. Se trata de algo que tiene que enseñarse desde el primer momento en el que se empuña un arma de fuego y no se trata de ninguna técnica avanzada sólo reservada a unos pocos, ni siquiera se trata de una técnica innovadora reciente, sino algo de siempre. En mi opinión, el hecho de no conocer y practicar esta técnica supone una importante deficiencia y carencia formativa.

Con instrucción aprendes la forma correcta de manipular tu arma de fuego ─cargar, descargar y comprobar su estado─. Hay mucho más tras estas manipulaciones de lo que la mayoría se cree; se podría escribir un libro entero sólo sobre la forma correcta de ejecutar estas técnicas fundamentales. Recargas en vacío, recargas tácticas e interrupciones son otras materias en las que la mayoría de tiradores no están demasiado bien versados. Sufrir una interrupción mientras se dispara a un blanco en el campo/galería de tiro es un mal menor. Saber cómo solucionar una interrupción en un enfrentamiento violento puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte.

Tiger McKee 3En un curso de tiro defensivo empiezas a formar tu respuesta frente a una amenaza violenta. Aprendes a moverte, comunicarte, utilizar una cubierta/parapeto y, en caso necesario, disparar, acciones todas ellas que, una vez más, son contrarias a nuestros instintos naturales. Nuestra respuesta natural cuando decidimos combatir es echar raíces en el suelo, pero quieres moverte, crear distancia o ponerte tras una cubierta/parapeto. En situaciones de estrés/tensión tendemos a quedarnos pasmados, permaneciendo en silencio, pero tienes que darle órdenes verbales a la amenaza o comunicarte con amigos y familiares. Los transeúntes se quedan congelados en estado de shock, esperando que alguien les diga qué hacer. Tú podrías ser el que tenga que dar un paso al frente y ordenarles que llamen al 112 o abandonen la zona. La inclinación natural es permanecer cerca de una cubierta/parapeto, pero la formación explica por qué eso es precisamente lo contrario de lo que quieres hacer en una situación defensiva.

Responder a un atacante violento puede suponer dispararle, pero si te mueves para crear distancia, le das órdenes verbales y te sitúas tras una cubierta/parapeto tu atacante podría cambiar de opinión y dar por terminado el enfrentamiento. Al convertirte a ti mismo en una víctima más difícil podrías vencer la situación sin tener que realizar ni un solo disparo.

Ahora bien, si es preciso disparar, se trata de tiro de combate, el cual constituye un mundo aparte del tiro deportivo. El blanco ─amenaza─ se estará moviendo y tú te estarás moviendo. La respuesta estándar consiste en colocar los disparos sobre el centro de masas en el pecho. Cuando eso no desemboca en la respuesta deseada es momento de dirigirse a otras zonas del cuerpo tales como la región pélvica. Las estadísticas nos dicen que la mayoría de los enfrentamientos tienen lugar en entornos con poca luz. ¿Sabes cómo trabajar en la oscuridad con una linterna? Un curso de tiro en condiciones de poca luz responderá a estas preguntas.

Y en cada curso recibirás una clase sobre seguridad. Cuando la mayoría de la gente empuña un arma de fuego su dedo se va sobre el disparador. Bajo la atenta mirada de un instructor competente aprenderás rápidamente a mantener tu dedo lejos del disparador y fuera del guardamontes a no ser que tus elementos de puntería estén sobre el blanco. Se te enseña a identificar siempre tu blanco y tener en cuenta el ángulo de tiro. La seguridad es nuestra primera y principal preocupación cuando quiera que manejemos un arma de fuego, independientemente del uso que se le vaya a dar, y especialmente bajos las condiciones de estrés/tensión e inseguridad de un enfrentamiento violento.

Otro beneficio de la asistencia a un curso de formación en tiro defensivo es el hecho por el que cuanta mayor formación recibas menos probable será que vayas a necesitar las técnicas que estás aprendiendo. La mayoría no comprenden la naturaleza de la violencia. Educándote a ti mismo y desarrollando un entendimiento sobre cómo y por qué se producen los enfrentamientos violentos te permite localizar potenciales problemas antes que éstos escalen. Evitación y escape debiera estar al principio de tu lista de tácticas.

Los vídeos y los libros resultan positivos en cuanto a que explican una técnica y cómo ejecutarla, pero no pueden ofrecerte sugerencias correctivas sobre lo que estás haciendo mal. Disponer de un instructor observándote ejecutar una técnica, ofreciéndote sus correcciones y críticas constructivas sobre cómo mejorar, es la única forma de conseguir una buena base en las técnicas necesarias.

Los cursos de tiro te muestran las técnicas que tienes que aprender, pero ten presente que durante un curso no tendrás el tiempo o las repeticiones necesarias para aprender verdaderamente los contenidos abordados. Tras recibir un curso depende de ti practicar las técnicas adecuadas hasta que finalmente la mayoría de ellas se conviertan en acciones subconscientes. Estas técnicas son perecederas. La práctica resulta imprescindible para mantener la competencia. Un buen curso de tiro debería incluir también información sobre formas de practicar en seco, que constituye la mejor manera de practicar tus técnicas sin tener que ir al campo/galería de tiro o gastar dinero en munición. Dedicar tiempo a practicar resulta tan importante como el tiempo y dinero invertidos en asistir a un curso de tiro.

Los cursos de tiro, y la consiguiente práctica, cultivan las técnicas físicas necesarias para manipular un arma de fuego, pero también genera la confianza mental necesaria para aplicar estas técnicas en situaciones de estrés/tensión. Saber cómo manipular un arma de fuego correctamente y con seguridad libera tu mente consciente para poder concentrarse en todo lo demás que está sucediendo. Tanto si estás intentando disparar mejor que tu compañero, poner la carne sobre la mesa (caza) o defenderte frente a un atacante violento, las técnicas necesarias para manipular tu arma de fuego correctamente y con seguridad son las claves del éxito.

Shootrite Firearms Academy LLC.Tiger McKee es el Director de Shootrite Firearms Academy, situada en el norte de Alabama, autor del libro The Book of Two Guns (El Libro de Dos Armas), colabora con varias publicaciones tácticas/sobre armas de fuego, instructor adjunto para el FBI y diseñador de la carabina Shootrite «Katana».

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